Peach and lime daiquiri sábado, noviembre 08, 2008
No sé quiénes eran los demás o quién era él, incluso, estaba allí con todo el resto a la orilla de la calle y podía sentir el frío y en algún momento fui a sentarme entre sus piernas, el calor de sus brazos rodéandome mientras yo estaba tan tranquila entre sus piernas, ni siquiera sé si supe su nombre alguna vez, pero me quedó la idea de que luego de la calle había algún campo y todos nosotros perdidos en medio de la nada y tres o cuatro días sentada sola, sin él, esperándolo, sin cambiarme de ropa, y cuando volvió más parecía un bailarín de tango en aquella ropa limpia y el sombrero tan característico, pero lo mismo me vio y dio igual esa ropa y la mía y los tres días con la misma blusa gastada cuando estuve ya en sus brazos, un abrazo, otro, ni siquiera recuerdo si un beso, ¿quién era?, ¿por qué nunca oí tu nombre?, ¿vas a aparecer así, algún día?
Etiquetas: los instintos, los soñados, soltera sin compromiso
Eso me suena a ponceo mija, pero sólo un poco.