Stay Monkey domingo, abril 05, 2009
Yo me pregunto si mi abuela habría sido como esas abuelas que crecieron en la Gran Depresión en los países de arriba y aprendieron a no botar nada y a vivir de comida en lata y pan congelado en la nevera, de modo que ahora estuviera enseñándonos a todos a sacarle el mayor partido a todas las cosas de la casa y seguro dijera que hay que comenzar a usar pañales de algodón para el bebito porque salen tan caros esos pañales desechables.
Yo me pregunto si mi abuela se habría sentido tentada de peinarme con jugo de limón cuando me viera con el cabello corto otra vez, como cuando era muy niña y la mujer de mi papá me llevó a que me cortaran el pelo hasta la cintura que mi mamá había cultivado con tanto cuidado.
Yo me pregunto si no sería mejor empezar a ser como el tipo que vi hoy en la micro y que se despidió de mí con una gran sonrisa cuando se bajó en el paradero del estadio.Claro, era un tipo que iba al estadio vestido de barrero de estadio, pero sonreía lindo y me dejó sonriendo a mí, porque podría haber sido como todos los demás barreros de estadio que me he pillado en la vida que prefieren medio mascullarme un piropo-insulto que me moleste en la base del cuello y no lo fue: decidió sonreírme así, como que fuera lo más normal del mundo.
Yo me pregunto si no debería echarte tanto de menos, si no debiera tener la esperanza de que vas a perdonarme un día y me ayudarás con el favor que te pedí con tanto miedo.
Yo me pregunto si no valdrá la pena levantarle el hombre a tu novia.
Etiquetas: de mis afectos, ecos de otros, los instintos, querido diario, retrato familiar, soltera sin compromiso
0 Respuestas a “Stay Monkey”