Hoy tuve mi primera nota de histerismo durante el año, y eso porque tenía que ir a dejar todo el papeleo que me pedían para postular al pase (he andado muchísimo en metro últimamente y me doy cuenta de lo caro que es), y haciéndole honor a esa circunstancia media genética de hacer todo a última hora me aparecí a la 1 de la tarde en la U, y evidentemente me había olvidado de algo, que era el sobre para meter el papeleo y después meterlo al buzón, así que salí corriendo otra vez al metro y me bajé en Mirador y corrí (lo que pude: si hay algo que me estresa de los malls es la gente que pasea tan campante y una no puede avanzar) hasta una papelería y compré 10 sobres ($295) y volví a correr al metro y de vuelta a San Joaquín, pero alcancé. Es que era hasta las dos. Y había una niña en mi misma situación parece, pero yo soy buena onda y le regalé un sobre para que no tuviera que correr como yo.

Al final la gracia esta del pase, aunque no me lo den, me ha costado 6 metros y harto calor.

Y hablando de eso, no entiendo a esa gente que abre paso hasta las puertas como estación y media antes de llegar a su destino. O sea, cuando está enfermo de lleno sí, pero con un... un llenamiento normal, no debería ser así, especialmente cuando esa gente que se mueve seguro se baja en una estación de combinación o de las más populares (como Bellavista de la Florida, donde vivo yo) y de todas maneras toda la gente que importunaron para pasar se va a bajar igual con ellos. No me molesta tanto como otras cosas, pero estaba pensando que quizás eso se justifica por la cultura micrística que tenemos los santiaguinos, porque para bajarse de la micro y bajarse razonablemente cerca del lugar donde una va hay que pararse mucho rato antes y tocar el timbre por lo menos sus 300 metros antes, quizás más, porque los micreros paran donde quieren, y de mala onda nomás, mientras que el metro siempre para donde tiene que parar... aunque una vez hice transbordo en Los Héroes y fue espantoso, es que el tiempo de las puertas alcanzaba apenas para que se bajara toda la gente y después todos se subieron un poco histéricos por alcanzar.

Me estresa andar en metro. Me estresa menos que las micros, desde luego, y más que los colectivos, pero creo que tiene que ver conque la mayoría de las líneas están bajo tierra y la falta de aire unida al ensardinamiento me ponen nerviosa. Creo que tengo tumultofobia :), pero no me da susto, me sube el calorcito a la cara y me pongo impaciente. En fin. Hola. Hoy es sábado y dormí y bajé el Unplugged de Lauryn Hill porque me encanta su voz y esas canciones son buenísimas, aunque los críticos hayan dicho qué cosas sobre ella.

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