Cuarto cé viernes, octubre 20, 2006
Ya ya ya. Como me he ganado adeptos, más vale comentar algo interesante.
No. Mejor voy a hablar de mi curso.
El tema es que hoy nos sacaron las fotos del anuario. Estuvimos con las niñas por lo menos una media hora hablando de poses, de alisadas de pelo y demases (lo que me recuerda que Turén, en la mañana, le comentó a alguien "quién será la hueona que trae el alisador al colegio?" en respuesta a la declaración de la Pao, que efectivamente lo llevó, y... en frente de ella, por lo que mi mami le dijo "Yo po hueón!" y... este tipo comentó algo como "pendeja superficial" o qué se yo), pero la foto en sí salió bastante bien. Creo. Yo era la primera de las niñas en salir (esta cosa de la lista alfabética, por Diox), y... nada. Saldré con un signo loser en la mitad de mi frente. Pero así soy yo. La Mila salió como mono animado, la Domi como popstar, la Javi como egipcia, la Caro y la Poli normales porque son unas fomes, y la Pao sale tierna. También está, por ejemplo, la foto del Tomy con la camisa abierta y el shocopanda en todo su esplendor... y el Oe sin polera en alguna posición estrambótica. Fue entretenido. Excepto para la foto grupal general máxima de los tres cuartos juntos, porque Max se sacó la polera y creo que le grité unas cuarenta veces que se la pusiera de nuevo, el indiscreto.
También Igor me preguntó sobre la foto antes de que me la sacara y me metió algo de conversa... pero fue agradable porque hablábamos de Roni con su pose sexy (no puedo explicar quién es Roni... jajaja en verdad no puedo), y luego me fui a comer. Pero bueno. Yo iba a hablar de mi curso. Creo que lo quiero. Caleta onda harto así. Siempre he sido la muchachita tímida que no dice nada y no se relaciona... pero me di cuenta de que no era ná tan así, porque desde segundo fui defensora de las causas perdidas y cada vez que hablaba dejaba la cagá (sigue pasando), a pesar de mi etapa apática/brígida del año pasado. Y me siento querida por todas esas niñas... es verdad que no me siento incómoda contándoles mis intimidades, porque todas lo hacemos, y hablar de cosas ridículas, políticas, sexuales y amorosas en un ambiente de hora-de-almuerzo-entretenida es lo mejor. Las voy a echar de menos. Y a los niños metaleros también, porque a pesar de que a veces me enervan, el resto del tiempo estoy muerta de risa con sus tonteras. El Mono con su "oye te da risa esto?", y los gritos varios de Dani y Max, y del Núñez, y el Tata con el Hernán alegando por todo, mal enfocados los cabritos, y no sé... nunca pensé que los iba a terminar amando.
Tengo una apuesta con Dani Weise... como me da lata comprarle el lomito palta, solo ocurrirá si entra a la Católica conmigo. Jaj. Hay que mantenerlo feliz al chiquillo - y pelearme con la Domi por él cuando se quede soltero, también. En fin. Estoy hablando tonteras.
Pero quiero a mi cuarto cé dos mil seis.
Etiquetas: querido diario
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