[Hilar palabras con cintas azules y hebras de oro] viernes, octubre 13, 2006
[Hilar palabras con cintas azules y hebras de oro]
Hebras perdidas en una rueca oscura que arde día y noche
y una aguja que hiere el alma y no el cuerpo, salen por la herida canciones de amor y también de esas que son como un beso violento, como un suspiro, y se van danzando al ritmo de la noche estrellada (y sus astros brillan azules, bastante lejos)
La luna quiere mirar, pero se le ha vedado el acceso.
A la señora no le gusta dejar rincón sin bañar con su luz plateada y se apodera de los secretos, que se quiebran en millones de pedazos y de voces, y se van huyendo los susurros por calles estrechas donde la ropa blanca cuelga de una ventana y hay un gato dormido hace semanas en el rellano de una escalera que no lleva a ninguna parte. Por eso la señora no puede entrar,
para que sus hijos saboreen la penumbra,
para que sean seducidos por los oscuros secretos,
para que no sea la sorpresa la que interrumpa sus amoríos
(a nadie le gusta que súbitamente enciendan la luz),
y para que su brillo apenas aparezca algunas veces, días y horas contadas,
(previa autorización escrita del hombre más enamorado del planeta)
y sus hijos disfruten de ella en quietud.
El frenesí es para otras épocas del año. No para aquéllas.
Etiquetas: de mis letras
decir. Está precioso. Admiro como escribes.
=D ya veo que me hace mucha falta leer. xD